Activistas feministas han dado a conocer que se ha logrado la primera vinculación a proceso por violencia vicaria en Quintana Roo, la cual es además la segunda a nivel nacional.
Se trata del caso de Eden B, quien fuera la pareja de Grisell Balderas, madre que hace poco llevara a cabo una huelga de hambre en Playa del Carmen. Y es que se vinculó a proceso a esta persona luego que se realizara una audiencia en la que el juez de control hizo un análisis para determinar si el señalado por violencia vicaria quedaba o no en libertad.
Tras el análisis de pruebas, el juez determinó la vinculación, debido a lo cual Eden B. tiene que acudir a firmar cada 15 días a la Unidad de Medidas Cautelares del Estado de Quintana Roo y no puede por ningún motivo acercarse a su ex pareja. Pero no ha sido detenido.
“Después de ocho meses de aprobada y publicada la ley de violencia vicaria en Quintana Roo, se está logrando en los tribunales de Quintana Roo se hable, se reconozca y se imparta justicia en el tema de violencia vicaria. Al ser la segunda vinculación a proceso el juez encontró datos para presumir la presunta responsabilidad de un sujeto que comete la acción de violencia vicaria”, expuso en entrevista Ariadne Song Anguas, abogada de Grisell Balderas.
La también integrante del Colectivo Xtabay explicó que la violencia vicaria es cuando un padre o madre ejerce violencia contra su pareja o ex pareja a través de la manipulación de los hijos.
Esta primera vinculación a proceso, señala la abogada, deriva de la primera denuncia por violencia vicaria hecha en Quintana Roo luego de la publicación de la ley.
En este caso, Grisell Balderas Jonguitud lleva tres años peleando en tribunales por poder ver a su hijo Mateo, de quien ha estado separado todo ese tiempo.
Si bien esta es la primera vinculación a proceso por violencia vicaria, las colectivas y activistas documentaron unos 50 casos en 2022 y en lo que va del 2023, en estos casi cinco meses, ya van 75 casos.
Por lo mismo, Ariadne Song resalta que si bien esta vinculación a proceso es un paso, aún falta seguir visibilizando la violencia vicaria en Quintana Roo.
“Es un voto de confianza para el Poder Judicial de Quintana Roo que se está dando acceso a la justicia a las mujeres de manera pronta y expedita y por el bien superior de la niñez”, puntualizó.
La activista finalizó invitando a las mujeres víctimas de violencia vicaria a que no se queden calladas y que se acerquen a los colectivos como Xtabay, la Red Feminista Quintanarroense, a Mujeres México, donde les darán acompañamiento. “No están solas”, concluyó.
