Rayan, un niño que cayó en un gigantesco pozo de Marruecos está captando la atención mundial, mientras luchan a contrarreloj por rescatarlo.
La tragedia ocurrida en Marruecos está comenzando a movilizar al mundo entero: se trata de Rayan, un niño de apenas 5 años que cayó en un gigantesco pozo.
El pequeño lleva más de dos días atorado mientras cientos de personas trabajan a contrareloj para sacarlo con vida. Lo complicado es que calculan que cayó a más de 32 metros de profundidad.

De acuerdo conmedios locales, los especialistas de Marruecos metieron una cámara al pozo y ahí encontraron a Rayan que, de forma impresionante, sobrevivió a esta caída.
Además de estar vivo, aparentemente se encontraba consciente y con algunos golpes en la cabeza. Por fortuna con ninguna lesión grave.
Sin embargo, están trabajando a marchas forzadas, pues el niño lleva más de 50 horas atrapado y la emergencia avanza.
¿Cómo cayó Rayan al pozo?
Los hechos ocurrieron en un pequeño pueblo llamado Igrán, en el municipio de Chauen, una zona montañosa el norte de Marruecos.
Rayan cayó al pozo, que pertenece al papá, cuando lo estaba acompañando en el trabajo y en un momento, sin que el papá se diera cuenta, el niño cayó.
“Es mi pozo, yo estaba reparándolo”, contó el padre en una entrevista que fue traducida y recuperada por El País.



Y añadió: “Alertamos a las autoridades y todos los vecinos han venido a apoyarnos”.
Rescatando a Rayan en Marruecos
Lo complicado en el rescate de Rayan y por la que llevan más de 50 horas intentando sacar al niño: el pozo es extremadamente profundo y muy estrecho.
Calculan que está a 32 metros de profundidad, pero el agujero en el que cayó —según el reporte de Al Aoula TV, recuperado por la BBC— es de menos de 45 centímetros.
Por lo que cualquier falla en las maniobras de rescate podría fácilmente derrumbar las paredes, cerrar el pozo y dejar atorado a Rayan.
Entonces las maniobras de rescate han sido por los laterales. Por lo que hay cinco máquinas excavadoras haciendo huecos alrededor del pozo en donde está atorado.



Hasta el momento, dos días después de la caída de Rayan, solamente han alcanzado a perforar hasta los 19 metros, pero esperan avanzar más conforme pase el día.
En tanto, el pequeño se encuentra consciente, los rescatistas le han bajado comida, agua con azúcar y una máscara de oxígeno.
“No les oculto que tanto su madre como yo estamos destrozados y muy nerviosos”, dijo el padre de Rayan mientras lo entrevistaban en la televisión de Marruecos.
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